La aplicación “Localisem”, disponible para Android, junto con el sitio web del Observatorio de Trata de Personas, son iniciativas que responden a una necesidad de reforzar el acceso a información confiable de manera gratuita, rápida e interactiva ante situaciones de desaparición de personas adultas y menores de edad, en vista de los vacíos legales y la falta de acción eficaz de la Policía al momento de atender estas denuncias.
El Observatorio de Trata de Personas del Centro de Capacitación y Servicio para la Integración de la Mujer (Cecasem) lanzó su nueva página web y la aplicación móvil “Localisem”, herramientas digitales que buscan fortalecer el acceso a información confiable y empoderar a la ciudadanía con recursos claros y específicos para enfrentar situaciones de trata y desaparición de personas.
Como primera iniciativa, se presentó la aplicación gratuita “Localisem”, disponible en la Play Store para dispositivos Android, la cual ofrece guías detalladas y contenido diferenciado según diferentes grupos, incluyendo niños y niñas, adolescentes, adultos, personas mayores y extranjeros, con el fin de brindar orientación sobre los pasos a seguir en cada caso particular cuando se vive una experiencia de desaparición de algún familiar o persona cercana.
“La aplicación (orienta) sobre cómo buscar a un niño o un adolescente y también brinda contenido referido a cada generación, como cuál es el marco normativo que las respalda y cuáles son las primeras acciones que deben hacer las familias (…). Hay bastante contenido interactivo, esa es la idea de la aplicación: pretende que la población esté informada y también sepa qué hacer ante una desaparición”, sostuvo la abogada y responsable del Observatorio de Trata de Personas del Cecasem, Wara Delgadillo, en entrevista exclusiva con EL DIARIO.
La necesidad de lanzar estas iniciativas radica en los vacíos legales y una falta de marco normativo regulador en la legislación boliviana, en materia de búsqueda de personas desaparecidas, pues la Ley 3933 solo regula los mecanismos de búsqueda de menores de edad que son reportados como desaparecidos, explicó Delgadillo.
No obstante, cuando una persona adulta desaparece, la Policía vincula la investigación al delito de trata, sin tomar en cuenta que la víctima puede haber desaparecido por otros delitos como secuestro, asesinato, feminicidio, narcotráfico, o puede haberlo hecho por cuenta propia. Debido a esto, el Observatorio encontró una “falencia legal” en la que considera importante apoyar.
“No todas las personas que desaparecen son víctimas de trata de personas. Pero, al no existir esta ley, un marco normativo que regule y establezca cómo se tiene que buscarlas, todas se vinculan a trata de personas”, señaló la experta al Decano de la Prensa Nacional.
Asimismo, la abogada afirmó que muchas familias no saben qué hacer luego de vivir esta experiencia, más allá de sentar la denuncia y hacer el reporte de desaparición, por lo que la app pretende orientar en el proceso: “Hay que acudir a los hospitales, a la morgue, hay que recrear las rutas que realiza, hay que contactar a los amigos, universidades y a todos los entornos posibles en los que (la víctima) pudo estar para, de alguna forma, establecer qué pasos siguió esa persona desde que se la vio por última vez”.
PÁGINA WEB Y
PRIMER CONCURSO
La segunda herramienta impulsada por el Cecasem es la página web del Observatorio, un recurso didáctico que ofrece información en seis áreas clave: trata de personas, tráfico ilícito de migrantes, violencia sexual comercial, pornografía, violencia digital y personas desaparecidas.
El sitio web tiene la dirección www.observatoriotratabolivia.org y puede accederse desde cualquier dispositivo con conexión a internet.
Delgadillo agregó que el sitio web incluye un apartado de consultas sobre legislación y también permite reportar desapariciones, logrando así visibilizar casos de personas en situación de riesgo.
Por otro lado, como complemento a estas iniciativas digitales, el Cecasem lanzó el I Concurso Contra la Trata de Personas a mediados de año en las categorías de Cortometraje y Reportaje Audiovisual, en el que 35 participantes, entre jóvenes, cineastas y periodistas, lograron visibilizar las diversas realidades de la trata de personas en Bolivia.
En la categoría de Cortometraje, el primer lugar fue para “¿Dónde están?” de Jhoel César Choque Pillco, por relatar la historia de dos jóvenes atrapadas en redes de trata mediante redes sociales. En Reportaje Audiovisual, se destacó “Prostitución en Oruro” de Iván Meneses Dick, que analiza la relación entre trata y prostitución en esa ciudad. Delgadillo agregó que este material está disponible en las redes sociales del Cecasem.
48 HORAS
Para Delgadillo, en Bolivia existe una “mala costumbre” por parte de la Policía que consiste en conminar a las personas que desean reportar una desaparición a esperar 48 horas para poder emitir el reporte e iniciar operativos de búsqueda.
Esto ocurrió, según comenta, por una mala interpretación del plazo de urgencia que establece la Ley 3933 para menores desaparecidos quienes, por su condición de vulnerabilidad, tienen mayor prioridad para ser encontrados frente a una persona adulta que haya desaparecido. Sin embargo, esto no significa que la Policía no deba realizar el reporte de desaparición de cualquier persona, luego de hecha la denuncia.
“Inmediatamente después de que se reporta la desaparición de un familiar o amigo, es obligación de la Policía (hacerlo), pero se ha creado una mala costumbre y una mala información respecto a estas 48 horas. Lo que en realidad dice esta ley es que, en casos de niños, niñas y adolescentes, la desaparición es mucho más urgente, porque se asume que sí o sí está vinculado a un delito (…). Entonces tampoco es correcto este tema del plazo de 48 horas”, explicó Delgadillo.
El Cecasem es una organización no gubernamental, establecida hace 34 años, que trabaja contra la trata de personas desde la prevención primaria, secundaria y terciaria. Desde su fundación en mayo de 2011, el Observatorio de Trata de Personas trabaja ininterrumpidamente en la viabilización de la trata de personas, tráfico de migrantes y delitos conexos a nivel nacional.