Las complicaciones que se dieron por la caída de las Reservas Internacionales Netas (RIN) y las medidas asumidas por el Banco Central de Bolivia (BCB) para evitar la reducción de la divisa estadounidense, provocaron una baja calificación y empuja al país a una zona de riesgo en sus obligaciones crediticias, es decir un «default».
El riesgo es muy alto de Bolivia con las obligaciones de deuda, debido a la situación de los dólares en la economía nacional, que empezaron a escasear, y pese a las medidas implementadas del Banco Central de Bolivia (BCB), para revertir la caída de las Reservas Internacionales Netas (RIN), no logran subir la divisa sino todo lo contrario.
Para el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, las perspectivas de crecimiento bajas, reflejado en los últimos informes de los organismos internacionales, obedecería al aumento del riesgo país en 1.800 puntos, sumado a las calificaciones bajas, también el riesgo en la inversión, la coyuntura económica, deuda pública elevada y el déficit fiscal, empujarían a un posible default.
Mauricio Ríos García escribió en su @riosmauricio «
) el riesgo de default se ha disparado y no deja de crecer cada día. El país lleva más de dos meses sin reportes semanales del BCB sobre las reservas».
De acuerdo a una publicación de El Deber Bloomberg señala que años de abandono a la industria del gas provocan escasez de dólares.
A eso se suma el expresidente Jorge «Tuto» Quiroga que escribió en su @tutoquiroga que Bloomberg informa lo que hace años sabíamos: el MAS se farreó el gas, cerró el Bolsín, dilapidó (las) RIN y se acabaron los dólares. Describen colas y comparan situación actual con debacle de UDP (Unidad Democrática Popular)».
Riesgo país
El economista y exdirector del BCB, Gabriel Espinoza, asegura que el riesgo país se ha disparado, y en estos momentos un endeudamiento en los mercados privados es inviable, pues tendría una tasa de 23%.
El mercado presenta altísimo grado de desesperación y necesidad de recursos. Hay mucho temor en el mercado sobre la posibilidad de que Bolivia (no) llegue a pagar su deuda soberana sobre todo los bonos soberanos que se vencen en agosto de 2023, un saldo de 180 millones de dólares, según el especialista.
«Con los niveles de reservas que se tienen y con los problemas que se tiene para obtener divisas por parte del Estado boliviano, la probabilidad que estos bonos no se repaguen es bastante alto», alertó.
Estamos en niveles similares a Ecuador y todavía no en niveles de Argentina, pero nos acercamos peligrosamente, advirtió.
Hoy la Argentina paga una tasa que oscila entre 28% a 30%; Ecuador, que entró en default hace unos años, y no baja su riesgo país está con un porcentaje de 24%; y Bolivia tendría que pagar un 22% si accede a financiamiento en el mercado privado, cuya situación es preocupante.
Efectos
De ingresar a un default, el canal de financiamiento para el país se cerraría, incluso en organismos multilaterales este nivel de riesgo país los obligaría a repensar algunas líneas de financiamiento, si bien no van a suspender los créditos ya contratados tampoco van a sacar a Bolivia de la planificación de desembolsos durante este año y el otro, pero se empezaría a la reevaluación de proyectos.
Pero no sólo el Gobierno tendría problemas de ingresar a la zona de default, sino también el sector privado y pues afectaría a todos los sectores de la economía nacional.
Otro sector afectado sería la importación de insumos, así como de compras básicas, y la industria de alimentos y medicamentos sentirían los efectos.
Bolivia es un importador, y el 60% de los insumos de la industria son adquiridos en el exterior. «Sino tiene dólares no van a tener productos en el mercado interno», reflexionó.
Espinoza señaló que es probable que el gobierno pueda entrar en default, y también los privados ingresarían en esta figura, como son las aseguradoras, sector financiero, en especialmente sí tienen emisiones en el extranjero, requerirán dólares.
El riesgo de default es grande pero también existe alerta en otros servicios que no necesariamente es por la deuda externa, apuntó.
Caída
Romero recuerda que los títulos de deuda pública que se han emitido en el mercado internacional tuvieron una caída importante, y existe poca expectativa de que la economía mejore.
El economista sostiene que Bolivia mostró, en los últimos meses, diferentes calificaciones de riesgo, y presenta una economía poco amigable y poco favorable para atraer inversiones extranjeras.
El contexto que presenta la economía nacional, y más aún con los bonos soberanos, debido a la caída de reservas internacionales, promueven un mercado para los que negocian con este tipo de instrumento, que pueden llegar a comprar a precios bajos y venderlos luego al Gobierno, el juego de la oferta y demanda.
Romero sostiene que la falta de información, la especulación, así como la desinformación provocan incertidumbre a nivel local e internacional.
Por su parte, el analista económico Darío Monasterio dijo que el país tiene problemas no sólo con la disponibilidad de reservas, sino en la forma de divisas para hacer frente a los vencimientos y obligaciones que se tiene con acreedores externos supeditado a tasas variables.
Monasterio señaló que la demanda de dólares también obedece al refugio del valor de sus ahorros, que busca la población, ante la incertidumbre de la economía nacional, debido a la falta de la divisa estadounidense, y refleja la desconfianza de la gente en la moneda local.
La especulación e incertidumbre lo ha generado el mismo gobierno, por no publicar los informes de las reservas, y las colas que se registraban en el BCB, después con el programa de venta y ahora con la compra a través de la página web, concluyó.