La organización indicó en un comunicado que en total se registraron unas 25.000 víctimas civiles desde el inicio de la guerra, de los cuales 1.624 son menores. Así, 532 murieron y 1.092 resultaron heridos, lo que supone un promedio de tres víctimas infantiles al día.
En Ucrania, advirtió la ONG, más del 90 por ciento de las víctimas civiles son el resultado de armas explosivas con una amplia área de impacto, que son especialmente mortales para los niños y niñas, que tienen cuerpos más pequeños y frágiles.
En este sentido, indicó que marzo de 2022 fue el mes más mortífero para la infancia, con más de 240 niños y niñas muertos y 260 heridos.
Este año, junio fue el mes más mortífero para los niños, con 54 víctimas infantiles. Las cifras aumentaron por el ataque de la semana pasada en Kramatorsk, en el que murieron 11 civiles, incluidas unas hermanas gemelas de 14 años y otra adolescente, según datos de la ONG.
NINGÚN NIÑO A SALVO EN UCRANIA
El texto indica que junto con la amenaza constante de muerte o lesiones, los niños y niñas en Ucrania experimentan una angustia psicológica significativa por las alertas de ataques aéreos, los ataques con misiles y los bombardeos que golpean el país todos los días.
«500 días de guerra provocaron más de 500 muertes infantiles en Ucrania. El sufrimiento que los niños tuvieron que soportar desde que estalló la guerra a gran escala es inimaginable. Ningún niño en Ucrania está a salvo. Con la amenaza de ataques con misiles siempre presente, un estado de angustia constante se convirtió en la nueva norma para los niños», subrayó Khush.
Save the Children hizo un llamamiento a todas las partes para que cumplan con las obligaciones contraídas en virtud del Derecho Internacional y de los Derechos Humanos, garanticen que los civiles y los bienes de carácter civil, especialmente los utilizados por los niños y niñas, como hogares, escuelas y hospitales, estén protegidos de los ataques. (Europa Press).