La agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), realizaron un llamamiento conjunto a Pakistán para que sigan protegiendo a los afganos vulnerables que buscaron seguridad en el país y podrían estar en riesgo inminente si se ven obligados a regresar.
El llamamiento se produce luego de que Pakistán diera un ultimátum a los inmigrantes irregulares en el país, tienen hasta el 1 de noviembre para abandonar Pakistán, en medio de un incremento de la violencia y los ataques terroristas, en especial en las zonas fronterizas con Afganistán, dando lugar a la inseguridad.
Afganistán, recuerdan que ambas agencias, atraviesa una grave crisis humanitaria con varios desafíos en materia de derechos humanos, especialmente para las mujeres y niñas. “Estos planes tendrían graves consecuencias para todos los que se vieron obligados a abandonar el país y podrían enfrentar graves riesgos de protección a su regreso”, añaden dichas organizaciones.
Acnur y la OIM reconocen, no obstante la prerrogativa soberana del Gobierno sobre las políticas internas, su necesidad de gestionar las poblaciones en su territorio y sus obligaciones de garantizar la seguridad pública de esta manera también lograr la mitigación de este problema.
Con todo, ambas agencias recuerdan que mantienen una estrecha y duradera colaboración con el Gobierno de Pakistán, están dispuestas a brindar apoyo en el desarrollo de un mecanismo integral y sostenible para registrar y gestionar a los nacionales afganos, incluidos aquellos que puedan necesitar protección internacional.
De la misma manera, las dos entidades aprecian la generosa hospitalidad de Pakistán hacia los nacionales afganos durante más de cuatro décadas, a pesar de los desafíos. La repatriación forzosa de ciudadanos afganos puede dar lugar a graves violaciones de derechos humanos, incluida la separación de familias y la deportación de menores, quienes serían los más afectados por su alto riesgo de vulnerabilidad, aseguran. (Europa Press)