“Tengo la paciencia más grande mundo, porque he armado también rompecabezas de 33.600. Soy el hombre puzle, como me llaman”, dijo Sanjinés.
Manifestó que también sabe de turismo y que tiene un hostal. “Soy la persona más feliz, tranquila”, enfatizó.
En su trayectoria, Sanjinés dijo que ha trabajado como voluntario con la Defensoría del Pueblo en la gestión de Rolando Villena y con Naciones Unidas.
Entre sus motivaciones para acceder al cargo, señaló que también ha sufrido vulneración a sus derechos de parte del Servicio de Impuestos.
En su propuesta, Sanjinés manifestó que pretende hacer de la Defensoría una entidad que promueva la unidad en el país, por encima de los discursos de “fraude” o “golpe”. (Erbol)