El viceministro de Comercio Exterior, Benjamín Blanco, en conferencia de prensa, dijo que el reconocimiento del certificado de origen es importante para el país, ya que se suma el singani a los ya reconocidos, el tequila, el pisco, entre otros.

Señaló que se tomó ocho años para llegar a este reconocimiento, pues la certificación de origen ahora abre mercados para el producto, que ya se comercializa en el país del norte, pero también en otros mercados del mundo.

Recordó que el singani ingresaba a Estados Unidos como brandi, ahora entrará como singani boliviano, Hecho en Bolivia.

El 75% de la producción de singani ingresa al mercado de Estados Unidos, pero también llega a Japón, Alemania y México, pero se deberá tomar promocionar el producto para ampliar la demanda internacional.

Informó que todo el proceso que está relacionado con el singani, como la producción de uva u otros, representa un movimiento económico anual de 140 millones de dólares. Indicó que el sector vitivinícola tiene la capacidad para producir el producto en mayor volumen.

Pobreza

Una hectárea sembrada de uva ayuda a que las personas puedan salir de la pobreza, por ello, es vital delinear marcos legales para incentivar la cadena productiva del vino y del singani, que al momento 5.000 familias viven de esta actividad productiva, cada año genera un movimiento económico de 140 millones de dólares, señaló el año pasado el gerente General de Casa Real y Campos de Solana, Luis Pablo Granier, a miembros de la Asamblea Legislativa al momento de recibir reconocimientos por su trayectoria empresarial.

Por su amplias trayectorias, aporte al desarrollo económico y convertirse en marcas bandera de Bolivia, Campos de Solana y Casa Real recibieron Homenajes de la Cámara de Diputados, pero también Luis Pablo Granier recibió el Reconocimiento Camaral como Empresario Joven, por su fortalecimiento empresarial al sector vitivinícola y su contribución a la economía nacional.

En su discurso, Granier dijo que la materia prima utilizada en la elaboración de vinos y singanis es 100% nacional, no tiene nada que envidiar a la producción de países vecinos, en especial del vino, pues la calidad fue demostrada en diferentes concursos internacionales, al ganar galardones.

Señaló que el singani está protegido por normas bolivianas, además no puede ser replicado debido a que la uva moscatel es producida en viñedos altamente competitivos, debido al terreno, que no cuentan otras regiones.

Japón ya ingreso al set de consumidores de singani, debido a las compras realizadas, ahora van en busca de Europa, esperan abrir este mercado de más de 500 millones de habitantes.

Bolivia exportó más de 7.700 litros de singani a cuatro países en 2022, por un valor de más de 36.000 dólares tras lograr su reconocimiento para adquirir una clasificación propia y única que determine su procedencia.