Bolivia debe someterse, después de nueve años, a una evaluación, y la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) organizó una conferencia magistral dirigida a Alta Gerencia, el «Rol de Directivos y Alta Gerencia en el Marco de la Preparación para la 4ª Ronda de Evaluación Mutua – GAFILAT».
La experta internacional, Alejandra Quevedo, expuso los conceptos centrales, los procedimientos y la metodología que se utilizan en cada evaluación mutua para verificar el grado de avance en la implementación y cumplimiento de las 40 Recomendaciones de la GAFI.
«La prevención y lucha contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas, Financiamiento del terrorismo y Financiamiento a la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva, es un tema de interés nacional, de relevancia para las entidades que componen el sistema financiero boliviano, por su transversalidad», señaló el presidente de Asoban, Ronald Gutiérrez.
A la cita acudieron al menos 50 gerentes de bancos, instituciones financieras de desarrollo, agencias de bolsa y directores de fondos de inversión.
EVALUACIONES MUTUAS
Quevedo, actual consultora en integridad financiera del Banco Mundial y otros organismos, enfatizó en su exposición, que las evaluaciones mutuas se realizan entre pares; es decir, son los propios países miembros del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat), quienes aportan expertos evaluadores para llevar adelante la revisión de cada uno de sus miembros y se tratan de procesos complejos que pueden extenderse hasta un año y medio.
La experta señaló que las evaluaciones mutuas toman como punto de partida los riesgos de Lavado de Activos (LA) y Financiamiento del Terrorismo (FT) y el contexto de cada país. La evaluación mutua se concentra en la evaluación de cumplimiento técnico, es decir, se analiza que el ordenamiento jurídico nacional esté adecuado a lo que establecen los Estándares Internacionales en materia de lucha contra el LA, FT y financiamiento de la proliferación (FP), establecidos en los Estándares del GAFI, así como el aparato institucional requerido para la implementación de estas medidas.
Adicionalmente, la evaluación mutua evalúa los niveles de efectividad del país en materia de prevención y combate al lavado de activos, financiamiento del terrorismo y de la proliferación a partir del análisis de los resultados del país en la implementación los diferentes componentes del sistema ALA/CFT.
ROL DE LA ALTA GERENCIA
Quevedo indicó el importante papel que debe desempeñar la alta dirección de las entidades, en el fomento y la promoción de una cultura de cumplimiento de las medidas de lucha contra las ganancias ilícitas y financiamiento del terrorismo.
La experta señaló que el involucramiento de la alta gerencia y de las entidades como sujetos obligados en la evaluación mutua, tiene al menos tres roles: i) A nivel institucional en la implementación efectiva de los controles internos sobre la base de los riesgos LA/FT del país. ii) A nivel sectorial donde las entidades financieras tienen que aplicar buenas prácticas y participar de diálogos con las autoridades competentes para la continua mejora de la implementación de los Estándares Internacionales. iii) A nivel nacional, contribuyendo con iniciativas regulatorias, así como la colaboración y cooperación con otros sectores de sujetos obligados a la prevención del LA y FT para elevar su cumplimiento.