No se advierte una verdadera recuperación de las recaudaciones tributarias, el gasto corriente mantiene su expansión, la inversión pública disminuye y se prioriza recursos para agropecuaria e industria, de acuerdo al análisis del Presupuesto General del Estado (PGE) 2023 de la Fundación Jubileo que califca al presupuesto público “sin cambio de rumbo”. Mientras el Gobierno asegura estabilidad por medio de la reconstrucción económica con sus medidas aplicadas.
Agropecuario e industria reciben 18% de inversión, un poco más que los sectores de hidrocarburos y minería, el país registraría, por décimo año consecutivo, un déficit fiscal y consecuente incremento de la deuda, por lo que esta prolongada situación demanda, de manera urgente, ajustes que permitan transitar hacia una senda de sostenibilidad, señala la Fundación.
Ingresos
En el programa El Mañanero, de un canal televisivo de Santa Cruz, el economista Luis Fernando García, dijo que el Gobierno quiere echar mano de todo lo que genera liquidez, va en busca de dólares luego de que se “farrearon” los recursos.
El Gobierno indicaba que iban a cuidar los recursos de los bolivianos, pero lo gastaron, el dinero de las reservas se va acabando, le tienen miedo a modificar el tipo de cambio, aunque ya lo hicieron indirectamente, sostiene el economista.
Aunque nadie quiere modificar el tipo de cambio, de todas maneras se lo va hacer, cuando, y cuando “explote” el sistema económico de Bolivia provocará un reacomodo de precios y del tipo de cambio, opinó.
En el caso de los ingresos por hidrocarburos, provenientes del IDH y las regalías, cayeron a partir del año 2015 hasta el actual nivel registrado los últimos años muy por debajo de lo alcanzado en 2013 y 2014.
Asimismo, la caída de la renta por hidrocarburos se dio, en principio, por la disminución de los precios internacionales de hidrocarburos, aunque los últimos años también debido a menores niveles de producción y exportación.
Para 2023, en el rango del nuevo nivel en el que oscilan estos ingresos, se tendría un incremento de 12% de acuerdo con las previsiones del presupuesto. Este presupuesto fue elaborado con un precio estimado del barril de petróleo de 71,90 dólares.
Inicialmente, los ingresos por impuestos (recaudados por el Nivel Central), si bien registrarían un leve incremento de 5% con relación al presupuesto 2022, aún no se advierte una verdadera recuperación de las recaudaciones. Desde 2016, los ingresos tributarios disminuyeron y el nivel previsto en el Presupuesto General del Estado (PGE) estaría por debajo incluso del año 2014, el análisis señala.
Con relación a los gastos corrientes (sueldos y otros), que crecieron de manera significativa casi constantemente durante más de 15 años, nuevamente registrarían un incremento en 2023.
Gasto corriente
El presupuesto 2023 de gastos corrientes es 7% mayor al presupuesto 2022. La constante expansión y consecuente alto nivel que han alcanzado es ahora un factor que afecta a la sostenibilidad de las finanzas públicas. En un escenario con ingresos limitados, contradictoriamente se mantienen gastos altos y crecientes; por lo tanto, persiste un déficit muy profundo.
Ya el economista y docente de la Universidad Católica Bolivia, Gonzalo Chávez, dijo que el gran problema de fondo es el déficit fiscal, es decir, conocer a dónde va a parar tantos recursos.
El Gobierno incrementó la burocracia estatal, y la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) va abriendo más supermercados en provincias, incrementando funcionarios públicos, pero también desde el Gobierno se promueve la creación de industrias estatales, que no tienen razón de ser, como las procesadoras de papas, sin tener la seguridad de que habrá la materia prima, en su momento indicaron especalistas.
Inversión pública
Por otra parte, si bien la inversión pública se incrementó notablemente durante el período de bonanza, los últimos años (al contrario del gasto corriente) cayó notablemente. Entre 2016 y 2022, la inversión, efectivamente ejecutada, se redujo a casi la mitad.
Para 2023, si bien se tiene un presupuesto de inversión pública de 4.006 millones de dólares, este monto es 20% menor a lo programado en el presupuesto 2022. Habrá que observar la ejecución que, en general, estuvo por debajo de los niveles programados.
Con relación a los sectores en los cuales se orienta la inversión, que reflejaría las prioridades del sector público en términos de impulsar el desarrollo, se presenta la distribución de esta inversión para el año 2023 y se prioriza al sector agropecuario y a la industria.
Déficit y endeudamiento
En la presente gestión se cumple 10 años consecutivos con déficit fiscal, como resultado de un escenario con limitados ingresos, pero con un nivel alto y creciente de gastos, principalmente gastos corrientes.
La situación no cambia, pues está en puertas un nuevo endeudamiento de más de 600 millones de dólares Y hay 4.000 millones para ser desembolsados, lo que provocará que el país suba su deuda con respecto al PIB.
El déficit se profundizó en los últimos años, si bien en 2023 se reduciría levemente a 7,5%, es aún un nivel muy preocupante. Un profundo y prolongado déficit refleja la complicada situación de las finanzas públicas, que no es coyuntural, por lo que revela la necesidad de implementar ajustes y reformas hacia otra dirección.
El déficit recurre a préstamos para financiar los mayores gastos.
Recaudación
Generalmente, los ingresos por impuestos son una variable que tiende a subir constantemente con el crecimiento de la economía y de la población (que demanda mayores bienes y servicios públicos).
El nivel de recaudaciones depende de varios factores, entre los principales está el nivel de la producción, por lo que esta situación es reflejo de la complicada situación que la economía atraviesa por varios años.
Además, aún no se ha resuelto o al menos avanzado en temas fundamentales, como la formalización de la economía y una reforma o adecuación del sistema tributario.
Ya son 8 años desde que se registró una disminución y que se presenta esta limitación en las recaudaciones, lo que manifiesta la urgencia de evaluar las políticas actuales, recomienda Jubileo.
Oficial
Entretanto, el Gobierno asegura que va camino a la reconstrucción de la economía por medio de medidas aplicadas, como los fondos, recientemente creados, con utilidades de la banca privada.
Además anuncia industrialización, a través de 33 proyectos, pero se desconoce el financiamiento puesto que el Gobierno requiere liquidez, en mayo se hará cargo del fondo de los trabajadores, con un patrimonio de 23.000 millones de dólares.
El responsable de la Gestora asegura un manejo eficiente, que creció en utilidades en la administración de fondos, sin embargo, no detalla de dónde salieron esos recursos, es como si el Gobierno hubiera adquirido nuevamente plata, de acuerdo a redes sociales.