Hace unos meses atrás el expresidente del Comité de Defensa de la Industria Nacional, Emilio Gutiérrez, denunció irregularidades en la contratación de una planta de agua por YLB, para la industrialización del litio en Uyuni.
En junio, Gutiérrez dijo que distintas empresas han denunciado que hay direccionamiento para adjudicar la obra a una empresa boliviana, y el daño sería superior a los 200 millones de dólares, por no poner en marcha la planta de industrialización a tiempo.
De acuerdo con la documentación que exhibió el denunciante, se observó que YLB en reiteradas oportunidades excluyó a empresas extranjeras del proceso de selección para esta obra. Es por ello, según Gutiérrez, que la licitación se declaró desierta «tres veces», una a fines de 2021, otra en febrero de 2022 y la tercera hace poco, de acuerdo a Los Tiempos.
Recientemente, la diputada de Comunidad Ciudadana, Luciana Campero, denunció en redes sociales que la CAMC sigue operativa, y que estaría trabajando en YLB, al respecto el presidente de la entidad estatal, Carlos Ramos, aseguró, en conferencia de prensa, que no existió ni existe ninguna relación contractual con la empresa CAMC.
En relación con el proceso de licitación internacional de Ingeniería, Procura y Construcción de la Planta de Tratamiento de Agua y Facilidades de Bombeo, Ramos enfatizó que el mismo se llevó a cabo en estricto cumplimiento del Decreto Supremo (D.S.) 0181, en el marco de la trasparencia y responsabilidad.
“No vamos a permitir que se ponga en duda la transparencia de YLB y mucho menos de nuestro gobierno”, dijo.
El ejecutivo de YLB manifestó que la empresa lleva adelante de manera transparente y responsable este desafío de la industrialización del litio, en estricto cumplimiento de la Constitución Política del Estado y normativa vigente.