En esa línea, los flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) recibidos por empresas con participación accionaria extranjera sumaron 1.048 millones en 2021 en términos brutos, mostrando una mejora significativa con relación a 2020, cuando llegó a 165 millones.
Por actividad económica, la IED bruta se orientó a sectores como la industria manufacturera ($us 382 millones), minería ($us 296 millones), hidrocarburos ($us 186 millones), comercio al por mayor y menor ($us 75 millones) e intermediación financiera ($us 68 millones), que en conjunto representan el 96,1 %, y mostraron una mejora significativa con relación a 2020.
Por país de origen, estos influjos provinieron principalmente de Suecia, Perú, España, Países Bajos y Suiza, que representan el 79,9 % del total recibido, señala la nota del BCB a tiempo de indicar que se destaca la importante recuperación de la IED bruta proveniente de Suecia ($us 286 millones) gracias a la reinversión de utilidades de empresas del sector de minería e industria manufacturera, que en 2020 registró un flujo negativo.
La IED complementa a la inversión privada nacional y la inversión pública; financia proyectos de interés económico; facilita el acceso a tecnología internacional; y contribuye a la formación de recursos humanos y generación de empleo, señala.
El Avance de Cifras de Balanza de Pagos y Posición de Inversión-2021 muestra además que la Cuenta Corriente, que expresa las transacciones realizadas por el país con el resto del mundo, registró un superávit de 815 millones de dólares equivalentes al 2% del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que las exportaciones y las remesas familiares recibidas experimentaron una mejora significativa.