Mientras el gobierno destaca una tasa de inflación acumulada que llegó a 1,2%, una tasa de desempleo abierta urbana reducida a 4,2% en mayo de 2022 y la pobreza extrema en 11,1% en 2021, y señala una estabilidad económica, sin embargo, los economistas observan que la misma es precaria y que los recursos para cubrir el gasto fiscal ya llegó a su límite.
El gerente General del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, sostiene que los indicadores macroeconómicos, que presenta el país, son verdaderamente auspiciosos, y se nota de una recuperación económica.
La estabilidad económica es algo que asombra al mundo, pero hay que cuidarla, ya que su equilibrio es precario por las situaciones que se presentan en el campo político, que podrían impactar en el sector social, sino se logra un efectivo diálogo, reflexionó.
Diferentes exprsiones de la sociedad civil
Asegura que la misma podría ser más rápida, y llegar a los indicadores de 2018 y 2019, pero también destaca la recuperación en el campo social, donde la distribución de los ingresos en el país bajó la extrema pobreza y la pobreza relativa.
También destaca el superávit del comercio exterior en el primer semestre, que representa el 83% del total de la gestión 2021, pero recuerda que el buen momento de las exportaciones es provocado por la subida de precios en el mercado internacional.
Pero también destaca el incremento de las exportaciones no tradicionales, mientras las materias primas fueron beneficiadas por los precios altos en el mercado mundial, a raíz de la invasión de Rusia a Ucrania.
Inflación
Sin embargo, en los mercados el alza de los precios ya sienten las amas de casa, y una muestra es el pan de batalla, que mantiene su valor pero disminuyó su tamaño, y no hay autoridad que realice el control correspondiente.
Los productos se incrementaron entre 0,50 bolivianos a 3 bolivianos, en algunos productos de la canasta familiar, ni que decir de la manteca usada en la elaboración de masitas, que se incrementó en 50 bolivianos.
Mientras el gobierno informa que a junio de 2022, Bolivia registró una inflación acumulada de 1,2%, la tasa más baja de la región, a comparación de Argentina, que presentó una cifra de 29,3% y Venezuela 23,9%.
Gobierno asegura que sus políticas de estabilización controlan los precios, pero no señala que es a costa del margen de utilidades de los productores, pero también por el contrabando, y la aplicación de subvenciones, que en el tiempo no es sostenible.
Al respecto, Rodríguez señala que anunciaron anticipadamente que Bolivia no es una isla, y de aquí a fin de año habrá una escalada de precios, debido a que se importará inflación. Sí, los bloqueos continúan, eso se va reflejar en el nivel de los precios de los alimentos”, sostiene.
El Gerente General del IBCE dice que se debe hacer respetar las leyes, y que el Gobierno debe abrirse al diálogo para evitar ese tipo de situaciones, y no perjudicar a productores y trabajadores.
Sugirió que hay que estar atento a las presiones que se den en los países limítrofes y el mundo en general, ya que el planeta avanza peligrosamente a una recesión, que podría convertirse en una estanflación, y Bolivia sentiría los efectos.
Entre tanto, el economista Darío Monasterio dijo que la inflación baja se presenta por dos razones, una baja demanda y oferta, o sea una actividad económica sin dinamismo, lo que podría a la larga afectar al crecimiento de la economía.
El gobierno informa que las exportaciones de Bolivia llegaron a 6.964 millones de dólares, a junio de 2022, más del 50% corresponde a la industria de manufacturas, seguido por hidrocarburos y minería, mientras que el superávit comercial alcanzó a 1.220 millones y se observa un incremento del 32% durante el período señalado.
Pero en su momento, el economista Gonzalo Chávez hizo una observación con respecto a la industria manufacturera, pues el oro metálico, que es prácticamente materia prima, y lidera las ventas, es decir que nuevamente el superávit comercial obedece a los productos primarios.