Los proyectos Plan de Acción Nacional junto a PlanetGOLD Bolivia, tienen el propósito de conectar a las comunidades mineras con tecnologías libres de mercurio a través de mercados formales, apoyar a la actividad de oro artesanal y de pequeña escala, en la adopción de prácticas de minerías más limpias, eficientes, de esta manera, reducir el uso del químico, que daña el medio ambiente y el habitad de los indígenas.
La iniciativa recién empieza pues autoridades del Ministerio de Minería y Metalurgia todavía no tienen respuesta a lo que se va hacer para proteger a los indígenas, afectados por la explotación de oro.
El ministro de Medio Ambiente y Agua, Juan Santos Cruz, dijo que con la misión de eliminar el uso del mercurio en la minería, la reducción será gradual, para ello se trabajará con el sector cooperativista.
Los proyectos tendrán una duración de cinco años, en el mismo se invertiría 605 millones de dólares, en este lapso de tiempo esperan cumplir con los objetivos planteados por los proyectos
La dirigencia de los cooperativistas indicaron que están abiertos a participar de los proyectos, ya que implicará el uso de tecnología, así como el tema económico y social, aunque también señalaron que no será sencillo.
Una publicación del Centro de Documentación e Información-Bolivia (CEDIB) muestra cómo creció la importación de mercurio, que pasó de menos de 50.000 kilogramos (kg) a más de 200.000 kg, es decir de 50 toneladas a 200 toneladas.
Señala que desde el 2015, se importa 15 veces más mercurio que lo requerido en la minería. De acuerdo a entendidos en la materia se usa entre 1 a 7Kg por Kg/oro extraído. Esto abre la posibilidad, que el excedente sea derivado a la explotación ilegal de oro o venta ilegal del mercurio a países vecinos como Perú.
EL Cedib señala que “si bien un relevante de países en nuestro continente ha ratificado el Convenio de Minamata y ha tomado medidas para disminuir su importación y uso (los casos de Perú y Colombia resaltan), estas acciones no han sido suficientes para disminuir su uso. Preocupa particularmente el caso de Bolivia que a diferencia de los países mencionados no ha tomado acciones legales ni operativas para regular el comercio y uso del mercurio; asumiendo un rol negativo como canal de comercio ilegal de este insumo”.
Mercurio
El mercurio es un metal capaz de disolver muchos otros metales como el oro, plata y aluminio (por lo cual no se lo permite en aviones). En su condición estándar, como lo solemos ver en el termómetro, se encuentra en estado líquido, de color plateado, sin olor, que al derramarse es difícil de recuperar ya que se divide en gotas pequeñas. Cuando se calienta se convierte en un gas sin olor ni color, motivo por el cual puede causar intoxicación por respiración sin que lo detectemos a simple vista. Esto basta para imaginar lo complicado que es su manejo o recuperación cuando es usado al aire libre, señala en su artículo la activista de derechos humanos y no violencia, cofundadora de Ríos de Pie, Jhanisse Vaca Daza, publicado en paginasiete.
“En Bolivia el mercurio se usa principalmente para la minería de oro «artesanal», aunque el nombre no debe confundirnos ya que hay más de 1,200 cooperativas de oro solo en el departamento de La Paz. Se utiliza este metal líquido para separar oro de las rocas o sedimentos en los que se encuentra. Al adherirse al oro, formando una amalgama, el mercurio permite su identificación y separación manual de forma más rápida”, explica.
Mientras tanto, Probioma señala que “toda actividad minera impacta en el medioambiente. La contaminación, pobreza y abandono/desplazamiento de comunidades enteras en las áreas mineras tradicionales del país, nos lleva a cuestionar este esquema irracional de explotación intensiva de nuestros recursos naturales destinados a la exportación (extractivismo) por sus altos costos sociales y ambientales”.
Proyectos
Ante ese escenario poco alentador para las áreas protegidas y los indígenas, ayer se presentaron dos proyectos para reducir el uso del mercurio en el lapso de cinco años, con un presupuesto que alcanza a 48,5 millones de bolivianos, en la minería artesanal y en pequeña escala del oro.
“Realizamos acciones urgentes que nos comprometen a lograr el Plan de Acción que dará el margen para tomar las acciones correspondientes para evitar que la explotación de este recurso afecte las condiciones de vida de las comunidades bolivianas fundamentalmente en las áreas donde se realiza actividad minera”, dijo el ministro en la presentación de los dos proyectos en un acto público.
La autoridad de Estado manifestó su confianza con la ejecución de los proyectos y su avance “vamos a mitigar de manera significativa los impactos ambientales fundamentalmente en actividades mineras que utilizan el mercurio”.
Según datos oficiales, el primer proyecto Plan de Acción Nacional (PAN) demandará una inversión de 3.430.000 bolivianos, será ejecutado en dos años por los ministerios de Medio Ambiente y Agua, de Minería y Metalurgia, de Salud y Deportes, contará con el apoyo de la agencia implementadora Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi).
El segundo proyecto es PlanetGOLD Bolivia que brindará capacitación técnica al sector de la minería artesanal y en pequeña escala del oro en los próximos cinco años, e impulsará acciones claves para reducir de manera paulatina el uso del mercurio, el acceso a financiamiento, además, la aplicación de mejores prácticas técnicas y tecnológicas. El proyecto cuenta con 45.162.819 bolivianos.
De acuerdo a exposición representantes del Ministerio del Ambiente del Perú, que presentaron el convenio de Minamata, y en la misma indicaron que en el vecino país se aplicaron varias iniciativas, que ayudaron a reducir el uso del mercurio.
Como se recordará el Convenio de Minamata tiene el objetivo de proteger la salud humana y al ambiente de las emisiones y liberaciones antropogénicas de mercurio y compuestos de mercurio, el mismo fue adoptado en la Conferencia de Plenipotenciarios en 2013 en Kumamoto, Japón, entro en vigor en agosto de 2017.
En Perú las entidades bancarias juegan un rol importante a la hora de promover la reducción del uso del mercurio, pues los créditos que ofrecen van en función de cumplir con el objetivo de Minamata.