Hasta junio de la presente gestión el número de quejas por el pésimo servicio de BoA y peor en el incumplimiento de horarios, seguían sumando ante la Autoridad de Fiscalización de Telecomunicaciones y Transporte (ATT).
En junio también el Viceministerio de Defensa del Consumidor exigió explicaciones a la aerolínea estatal sobre los retrasos.
De acuerdo a un reporte de prensa, hasta mayo sumaron 1.209 quejas de usuarios de BoA ante la ATT. Y la cifra va subiendo con el último retraso en el vuelo del pasado 20 de noviembre, sin embargo, la solución no llega y se desconoce de sanciones.
En su momento, el economista y docente de la Universidad Católica Boliviana, Gonzalo Chávez, en sus redes sociales, indicaba que “el gas se hizo gas”, y que la entidad fiscalizadora no hizo su trabajo con respecto a YPFB, pues no reguló la actividad de la petrolera estatal.
Esa misma comparación se puede realizar de la ATT a BoA, pues la empresa estatal goza de la preferencia estatal, debido a que monopoliza el mercado nacional y no dejaría ingresar a otra operadora grande.
Hace unos años, representantes del LAB tramitan su reingreso a operaciones en el mercado nacional, sin embargo, las entidades estatales encargadas de regular a las empresas aéreas pusieron una serie de trabas, pero el más fuerte fue el tema impositivo.
La línea aérea contaba con toda la infraestructura para volver al mercado nacional, pero pusieron varias trabas en su camino, que desistió de su intención; pasó similar situación Aerosur, que quedó en el camino.
El tema impositivo también acecha a Amaszonas. En enero de la presente gestión los medios de prensa informaron que el Gobierno demandó a la aerolínea a cumplir con sus deudas con instituciones por un monto que asciende a 81,8 millones de bolivianos.
Amaszonas tiene una deuda con la ATT de más de 11 millones, con SABSA de más de 4 millones, con la ex Aasana, ahora Naabol, de más de 2 millones, tiene también deudas con Impuestos Nacionales de más de 64 millones de bolivianos, con BBVA Previsión de 413.000, con Futuro AFP son 313.000, con la Aduana de más de 14.000, con el Ministerio de Trabajo de más de 45.000, señalaba, en esa fecha, el ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Édgar Montaño.
QUEJAS
A pesar de las innumerables quejas que realizan los usuarios de BoA, a la fecha al parecer no se hicieron efectivas, pues los retrasos continúan y un servicio cuestionado.
Los reportes de prensa indican que el vuelo que tenía que partir a las 12:30 de Cochabamba a La Paz, el pasado 20 de noviembre, tuvo un retraso de más de 3 horas; y los pasajeros sin ninguna explicación razonable estuvieron esperando para la autorización del preembarque.
Pero también evidenciaron a personas esperando en el avión a una temperatura alta.
Los pasajeros, en esa ocasión lamentaron que les hayan hecho subir a un avión que está mal y no haber solicitado otro en mejores condiciones.
Expertos en el tema indican que cuando operaban varias líneas aéreas en el mercado nacional, periodo del LAB, las revisiones eran constantes y las revisiones no demoraban mucho, pues el mantenimiento tenía periodos de tiempo.