El siglo XXI trae muchas sorpresas para la sociedad y la economía mundial. La alimentación saludable y la biodiversidad serán determinantes para que los países mantengan su liderazgo económico o pierdan el mismo. La pandemia covid-19 afectó a la actividad productiva mundial, ahora los empresarios y organismos internacionales apuestan primero por la vacuna para reactivar el aparato productivo, según varias publicaciones.
En una entrevista realizada por France a la periodista Marie-Monique Robin, autora del libro el Mundo Según Monsanto, asegura que más de 60 científicos, consultados a nivel mundial, aseguran que el mejor antídoto contra la próxima pandemia es preservar la biodiversidad.
“En su último libro, La fabrique des pandémies (La fábrica de pandemias), la periodista francesa Marie-Monique Robin ha conversado con 62 científicos de todo el mundo cuyas conclusiones son categóricas: la pandemia actual es solo la punta del iceberg. Detrás vendrán otras y todos somos responsables de ello”.
“Los investigadores nos dicen que las causas que están en el origen de las nuevas enfermedades son las mismas que están provocando el cambio climático. Esto significa que cuando se es responsable político, si se quiere evitar la próxima pandemia, hay que tomar medidas a nivel internacional”, asegura en la publicación difundida por la página web: https://www.soberaniaalimentaria.info/.
Sostiene “por ejemplo, hay que dejar de importar soja transgénica para alimentar al ganado europeo. Porque cuando importamos soja de Argentina o de Brasil, antes de eso ha habido una deforestación que hará enfermar no solo a los pueblos que viven en esos países, sino también a nosotros. También hay que dejar de importar aceite de palma para usarlo como combustible para nuestros vehículos”.
“Todo está ligado, todo está interconectado. Y estas medidas que adoptemos para preservar la biodiversidad también serán positivas para el clima. Serán buenas para el clima, buenas para la salud y buenas para la biodiversidad”, agrega.
Por su parte, el investigador de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Lucio Tito, señala, en su trabajo la Alimentación del Siglo XXI, que el mundo en este siglo, tras décadas de continuos, múltiples y agravados problemas nutricionales, va asumiendo la misión de recuperar la alimentación natural.
Agrega que los diversos tipos de cáncer, diabetes, alergias, intolerancias digestivas, etc. son atribuidas a la manipulación y alteraciones que ha sufrido la dieta de los habitantes del planeta a lo largo de décadas.
“Por ello la opción de la alimentación orgánica ha sido considerada incluso como política de Estado en diversos países”, apunta.
En Bolivia, se tiene una biodiversidad significativa, que con el tiempo va perdiendo fuerza por los avasallamientos, la agroindustria y el cambio climático.
La Asociación de Organizaciones de Productores Ecológicos de Bolivia (Aopeb) alberga a miles de familias a nivel nacional, pero su producción no es muy significativa.
Tito informa que según un estudio de la organización alemana Bund Okologishe Lebensmitterlwirtschaft (BOL), hasta el año 2018, Suiza encabezaba el top de 10 países con el mayor consumo per cápita de alimentos orgánicos en el mundo, con un consumo que superó los 307 dólares mensuales por persona. Le seguían la mencionada Dinamarca, con un consumo de 305 dólares y Suecia con 260 dólares.
En el listado, Austria y Estados Unidos son los dos siguientes países en comprar más productos orgánicos con 325 y 133 dólares por persona respectivamente.
Cuidado
La periodista francesa informa que los científicos, de varias especialidades, señalan que han descubierto una serie de mecanismos que muestran cómo la destrucción de la biodiversidad (la deforestación o la destrucción de bosque tropical primario en África, Sudamérica o Asia) está en el origen de las zoonosis.
Las zoonosis son enfermedades provocadas por patógenos que se transmiten de la fauna silvestre al ser humano y, muy a menudo, a través de los animales domésticos.
Deforestación
En los últimos años diferentes publicaciones a nivel mundial y nacional informaron sobre el proceso de deforestación que vive Bolivia, con el objetivo de ampliar la frontera agrícola, pero también por avasalladores.
Pero Bolivia no solo se ha visto afectada por los incendios de los años pasados, sino que cuenta también con un enemigo invisible: la degradación del suelo.
“Los incendios son una de las mayores amenazas en Bolivia, cada año se queman 3,5 millones de hectáreas”, agregó Verónica Ibarnegaray, directora de Proyectos de Conservación de la Fundación Amigos de la Naturaleza de Bolivia, en declaraciones al medio digital DW, el pasado año.
Vacunación
Los empresarios a nivel nacional, así como los gobiernos subnacionales solicitaron liberar las vacunas para que el sector privado y autoridades departamentales y municipales puedan importar, pero el Gobierno demoró en acceder al pedido, y hoy los casos de covid-19 sobrepasan a la gestión de Jeanine Añez; y recién dio el brazo a torcer las autoridades nacionales.
Empresarios y organismos internacionales, por separado, coinciden que la vacunación masiva, sería vital para empezar con la recuperación económica.