Gustavo Alfaro se despidió ayer lunes de Boca Juniors, porque su contrato no será renovado por los nuevos directivos, con una carta en la que aseguró haber vivido “sensaciones ambiguas” durante su año como entrenador del Xeneize. En la misiva que envió a los medios locales, el técnico, que asumió en enero, agradeció a los empleados del club, a los directivos, al director deportivo, Nicolás Burdisso, y a los jugadores por “su compromiso”, su “dedicación” y por “sus ganas permanentes de superarse”.
No se encontro contenido.